Valor social del Cristianismo (Nacionalismo Católico NGNP)

Para contrarrestar la gran mentira que trabajar para llevar a la realidad la "comunidad organizada" peronista es trabajar por el Reino de Cristo, compartiremos varias notas basadas en el libro 
"La reconstrucción social según el plan de S.S. PIO XI" de Carlos Bruehl 


Primera Parte:

VALOR SOCIAL DEL CRISTIANISMO


Aunque no podamos proclamar que el Evangelio sea - en primer lugar o principalmente - un mensaje social cuyo fin es el de establecer un nuevo orden económico, eso no equivale a negar la influencia social que tienen las enseñanzas de Cristo. Tal influencia existe realmente, y a pesar de su carácter remoto e indirecto, es una influencia verdadera y de largos alcances. Observando las cosas con más detenimiento se verá que la razón misma del gran valor social del cristianismo reside en su carácter altamente individualista.

El externalismo moderno nos ha hecho olvidar que la justicia social no es el atributo de los convenios económicos, sino una cualidad del individuo. El cristianismo es un llamado al individuo, porque únicamente éste puede dar la respuesta moral necesaria. De ahí que, haciendo su llamado al individuo, el cristianismo toma el único camino que puede conducir a la regeneración de la sociedad. En cambio, todos los que han elegido el camino opuesto, y buscan moralizar el orden económico por medios externos, sólo en resultados superficiales.

El camino que lleva a la justicia social está dentro de la conciencia individual. Y la justicia social no es una cualidad abstracta para ser realizada en algún lugar indefinido dentro de un proyecto utópico. La justicia social no es más que la justicia de un individuo que, en su capacidad tanto individual como social, da a su prójimo lo que le corresponde. El desapego y la lejanía aparentes de las enseñanzas de Cristo para con los problemas sociales, son los que en realidad hacen de esa enseñanza algo tan actualmente práctico en el plano social. Si la justicia social consistiese sólo en convenios económicos, no sería un tema realmente práctico ni un urgente deber; habría de esperar tranquilamente que surtiesen su efecto aquellos deseables convenios que producen automáticamente las justas relaciones entre los hombres. Y mientras tanto, las necesidades inmediatas del individuo no tendrían ninguna injerencia en la cuestión. Es ésa precisamente la actitud socialista, que, a ese respecto, es diametralmente opuesta a la cristiana. La comparación entre el socialismo y el cristianismo nos ayudará a comprender mejor la importancia que este último da a a los elementos personales e individuales.

(Próxima nota: "Comparación entre el socialismo y el cristianismo")



TRABAJEMOS POR EL VERDADERO REINADO SOCIAL DE CRISTO, LA "VÍA PERONISTA" PARA LLEGAR A ESE REINO, ES FALSA, NOS LLEVARÍA A UNA DICTADURA SOCIALISTA "NACIONAL", COMO EL MISMO PERÓN LO DIJO.