La crisis de la laguna del desierto fue una de las disputas territoriales más largas y complejas entre Chile y Argentina, que se extendió desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX. La zona en conflicto era un área de 481 km² en la Patagonia, donde se ubica la laguna o lago del Desierto, un cuerpo de agua rodeado de montañas y glaciares. El origen del problema se debió a una ambigüedad en el Tratado de Límites de 1881, que fijaba el límite entre los dos países en la Cordillera de los Andes. Sin embargo, en esa región, la cordillera no era una línea continua ni bien definida, sino que presentaba varias ramificaciones y valles. Esto dio lugar a diferentes interpretaciones sobre cuál era la verdadera divisoria de aguas entre las cuencas hidrográficas del Atlántico y el Pacífico.
En 1898, ambos países solicitaron la intervención del gobierno británico para resolver el asunto, y en 1902 se emitió un laudo arbitral que favorecía a Chile, al establecer el límite más al oriente de lo que reclamaba Argentina. Sin embargo, Argentina nunca aceptó este laudo, y mantuvo su presencia en la zona, argumentando que tenía derechos históricos, geográficos y jurídicos sobre el territorio. Chile, por su parte, también realizó actos de posesión y soberanía en el área, lo que generó tensiones y roces entre las autoridades y pobladores de ambos lados.
La situación se agravó en 1965, cuando se produjo un enfrentamiento armado entre gendarmes argentinos y carabineros chilenos, que dejó un saldo de un muerto, un herido y dos prisioneros por el lado chileno.
Este incidente provocó una crisis diplomática entre los dos países, que estuvieron al borde de una guerra. Se realizaron varios intentos de negociación y mediación, tanto bilaterales como multilaterales, pero ninguno logró una solución definitiva. Finalmente, en 1991, se firmó un acuerdo para someter el caso a un tribunal arbitral formado por cinco jueces internacionales, que dictó su fallo en 1994. El tribunal reconoció la validez del laudo de 1902, pero también consideró otros elementos, como los mapas oficiales, los actos de posesión y la equidad. El resultado fue favorable a la posición argentina, ya que le otorgó el 80% de la zona en disputa, incluyendo la laguna del Desierto. Chile aceptó el fallo, aunque pidió una reconsideración, que fue rechazada por el tribunal en 1995. Así se puso fin a la controversia, que duró casi un siglo.
El enfrentamiento entre Gendarmería y Carabineros
El enfrentamiento fue un incidente armado que ocurrió el 6 de noviembre de 1965, en el marco de la disputa territorial por esa zona de la Patagonia.
Según fuentes argentinas, 12 gendarmes se enfrentaron con 4 carabineros que se habían instalado en un puesto llamado Vega del Cóndor, que Argentina consideraba dentro de su territorio. Según fuentes chilenas, los gendarmes eran entre 40 y 90, y los carabineros eran 5 o 10. El tiroteo duró unos 20 minutos, y dejó como saldo un carabinero muerto, el teniente Hernán Merino Correa, un carabinero herido, el sargento Miguel Manríquez, y dos carabineros prisioneros, el cabo Luis Cárdenas y el soldado Mario Sandoval.
Los gendarmes también arriaron la bandera chilena que ondeaba en el puesto y se la llevaron como trofeo. Este hecho provocó una grave crisis diplomática entre los dos países, que estuvieron al borde de una guerra.
La bandera fue devuelta a Chile en 2017