En 1789 el reverendo inglés Thomas Malthus publica su “Ensayo sobre la ley de la población” donde afirma que la población suele aumentar en una proporción geométrica, mientras que la producción de alimentos sólo puede aumentar en una proporción aritmética. Concluye por tanto, que la población suele exceder las posibilidades reales de alimentación que ofrece la tierra, y que esta era la causa de que la miseria estuviera siempre presente en las sociedades humanas, principalmente en las más atrasadas, al tener más limitadas sus capacidades de producción.
“Afirmo que la capacidad de crecimiento de la población es infinitamente mayor que la capacidad de la tierra para producir alimentos para el hombre. La población, si no encuentra obstáculos, aumenta en progresión geométrica. Los alimentos sólo aumentan en progresión aritmética. Basta con poseer las más elementales nociones de números para poder apreciar la inmensa diferencia a favor de la primera de estas dos fuerzas”. Malthus. Ensayo sobre la ley de población. 1798.
Para Malthus los factores que determinan el crecimiento de la población son la abundancia y la estabilidad en los matrimonios. A estas sociedades Malthus las llamará virtuosas. Por el contrario, los factores que actúan como limitadores del crecimiento de la población son la miseria y el vicio. Por ello, Malthus sugirió que el tamaño de las familias de las clases más bajas debería estar regulado para no tener más hijos de los que pudiesen mantener. En su opinión si se ayuda al hombre que muere de hambre a ser más o menos libre o medianamente próspero, se casará, tendrá un número indeterminado de hijos y no habrá alimentos para todos.
Malthus ideó varios procedimientos para contrarrestar el crecimiento de la población, y los clasificó en dos tipos:
- Métodos preventivos orientados a reducir la proporción de nacimientos.
- Métodos positivos, encaminados a incrementar la mortalidad.